Funcionarios de Polisur se perfilan como estructuras criminales.
Los policías de San Francisco, estado Zulia están cada vez más involucrados en el crimen organizado.
Las recientes denuncias que se han viralizado y la investigación de 9 funcionarios por su vinculación a abuso de autoridad, torturas, extorsiones, simulación de delitos, se han viralizado situaciones donde han maltratado a grupos de personas en la comunidad "La Mano de Dios" por ejemplo, otra en la que despojaron de su vehículo a un adulto mayor y su familia sin ninguna razón, el maltrato a los privado de libertad y su constante extorsión, son algunas de las situaciones dadas a conocer por distintas organizaciones sociales, comunidad y diputados.
No olvidemos su historia relacionada con sicariatos y tráfico de drogas que muestran cómo los cuerpos de seguridad, como es el Zulia de un importante estado fronterizo se están convirtiendo en estructuras de crimen organizado.
Las autoridades capturaron hace algunos años a nueve funcionarios policiales del estado Zulia, a quienes les incautaron 96 panelas de marihuana. Cinco de los detenidos pertenecen a la Policía del Municipio San Francisco de esa entidad y cuatro a la policía estatal. Los acusaron de tráfico de drogas y porte ilícito de armas y, además, los vincularon con el asesinato del jefe de inteligencia de la policía de Zulia, Benito Cobis, quien fue ejecutado por sicarios en el 2018.
Los otros seis funcionarios detenidos también pertenecen a la policía estatal pero que venían de ser parte de las filas de Polisur y entre ellos figura Luis Orlando Curiel, hombre de confianza del ex gobernador del estado Zulia, Omar Prieto, y quién fue el predecesor de Cobis en el mismo puesto. Curiel fue responsabilizado de ser el autor intelectual del homicidio de su antecesor. Él habría encargado presuntamente, el sicariato de Cobis y en la actualidad permanente detenido.
Estos hechos motivaron la intervención de la policía estatal por orden del para entonces ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Néstor Reverol. Posteriormente, la inquietud del gobierno nacional por lo que sucede en los cuerpos de seguridad en Zulia también se manifestó con la intervención de la Policía del Municipio San Francisco sin resultados evidentes.
Breve análisis.
El asesinato del para entonces jefe de la Dirección de Inteligencia de la Policía del estado Zulia, Benito Cobis, seguido de detenciones e intervenciones de cuerpos de seguridad en esa entidad, no solo confirma el alcance de la violencia en la región, sino que además devela posibles vinculaciones de funcionarios de esta institución de seguridad -cercanos a las más altas figuras en la función pública- con el crimen organizado.
Luis Orlando Curiel, sustituto de Cobis y presunto autor intelectual del sicariato, fue el hombre de confianza del actual gobernador Omar Prieto desde 2008, durante sus dos mandatos como alcalde de San Francisco, en Zulia.
Adicionalmente, Zulia es el estado de Venezuela con más casos de delincuencia organizada (35,7%), según el registro anual de la ONG Paz Activa; tendencia que se mantenido.
En su territorio operan diversas estructuras criminales dedicadas a distintos delitos, siendo la extorsión uno de los más importantes. Éste se materializa en el paso fronterizo entre Paraguachón (Zulia) y Maicao (La Guajira), vinculado por organizaciones como el Cartel de La Guajira, que actúa con total libertad y cuya conformación no es clara.
Aún está por verse la efectividad de las iniciativas del gobierno para sanear la instituciones policiales del Zulia. Por lo pronto, los hechos recientes dejan claro que algunas policías del Zulia han degenerado en estructuras criminales, y sus funcionarios en lugar de evitar el delito, se han convertido en delincuentes.
Fuente: www.es.insightcrime.org
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